JVSI-Afrique
(Jeunes Volontaires pour la Solidarité
Internationale) es una organización no gubernamental que desde hace
unos años lleva realizando proyectos de educación y socialización en el país
africano de Togo, en la zona intertropical situada al occidente del continente vecino.
Miles de voluntarios llegados de varios países del mundo se han comprometido
con la labor multidisciplinar de esta pequeña ONG participando in situ en las
actividades organizadas por los fundadores togoleses en la capital, Lomé. Una
ciudad de más de 600 mil habitantes en los que casi el 40% viven con
poco más de un euro al día, formando parte de la llamada línea internacional de
la pobreza o “One dollar countries”.
Los integrantes de la asociación, conscientes de la situación precaria de los
togoleses y su población infantil, carente de los mínimos servicios educativos y sanitarios,
decidieron poner en marcha esta obra de acción social para ayudar a aniquilar
esta lacra que atenta contra uno de los Derechos Fundamentales
proclamados por la Carta de las Naciones Unidas, el derecho a la Educación.
Se abrieron al mundo online bajo un dominio .org con la esperanza de expandir su mensaje de
ayuda al mundo exterior y transmitir su grandiosa intención a esta Aldea Global en la que vivimos gracias
a las Nuevas Tecnologías. Y así fue. Poco a poco, adolescentes y jóvenes de
tantos países fueron teniendo acceso a la información sobre la realidad de Togo
y la creación de la JVSI, a través de la cual podrían involucrarse en un proyecto
de solidaridad conjunta, que se extiende no sólo al país togolés sino a otros
muchos del África subsahariana, como Benín, Ghana, Burkina-Fasso, Nigeria y
Senegal.
Grupo de voluntarios en una visita a la selva intertropical deTogo, donde interactúan con el nuevo entorno. |
Desde Jeunes Volontiers se llevan a cabo varios tipos de
actividades enfocados al desarrollo personal y social de los colectivos
desfavorecidos en África: apadrinamiento, alfabetización de las
mujeres, apoyo escolar, lucha contra el paludismo y el SIDA, construcción de
ambulatorios, bibliotecas municipales, escuelas, baños públicos, residencias de
enfermos, etc. Los participantes tienen
la opción de pasar una estancia de duración determinada (desde dos semanas
hasta meses), pero algunos de ellos, tras regresar a sus países de origen sensibilizados con la realidad que han vivido en tierras africanas, llevan más allá su compromiso y emprenden
campañas de sensibilización social e información de la asociación en sus entornos locales a través de varias actividades como exposiciones, recolección de fondos
de ayuda financiera o captación de futuros voluntarios, entre otras.
Apadrinar, el acto necesario
Unos escasos euros nunca fueron mejor amortizados. Aquí no
encontraría debate dialectico ni el propio Marx. Valor muy por debajo del
resultado obtenido. El apadrinamiento de niños en edad escolar que sobreviven bajo condiciones
vitales deficientes es un acto en el que con una pequeña aportación económica se consiguen resultados mayores, inversamente proporcional al propio valor
material de la cantidad ofrecida.
Jeunes Volontiers trabaja con especial insistencia en la concienciación de la población mundial a la hora de comprometerse con el apadrinamiento, una acción solidaria muy productiva. La
duración es de cuatro años y con una cantidad mínima de 50 euros anuales se
cubren los gastos totales del apadrinamiento escolar de un curso en un niño. En
el casos de jóvenes adolescentes de 17 o 18 se realizan apadrinamientos de
aprendizaje de 100 euros anuales, ya que se trata de jóvenes en situaciones
conflictivas en donde la escolarización ya no es viable por lo que se opta a la
formación en oficios manuales para que puedan crear sus propios talleres o
empresas. En cualquiera de las dos opciones y como suele ser en estos casos, el
padrino o madrina es puesto regularmente al corriente sobre la evolución del
pequeño.
Niños callejeros saludan a Jeunes Volontiers. |
Las líneas de acción del apadrinamiento en Jeunes Volontiers
abarca tanto la escolarización, donde los escolares podrán adqurir las mínimas
habilidades como aprender a leer y contar, hasta la opción de acceder a una formación
profesional, pasados los años de educación primaria. Además, son inmersos en
actividades para saber relacionarse con el medio ambiente, tales como gestión del
agua, plantación de árboles o reglas básicas de higiene y salud, conceptos
totalmente desconocidos en muchos casos, teniendo en cuenta que se tratan de
niños analfabetos y/o huérfanos que han sido privados de las primeras etapas de
socialización en sus primeros años de vida.
Asegurando el acceso a la educación continua, se asegura una
disminución de la delincuencia de jóvenes y el desarrollo de personas adultas
independientes capaces de realizarse personalmente, y por tanto, en condiciones
de tomar el relevo para continuar con el desarrollo y crecimiento de nuevas
generaciones en sus poblados y naciones.
Jeunes Volontiers–Afrique, una organización no gubernamental gestada desde las propias
raíces de Togo o Republica Togolés, país rico en recursos minerales de unos 6,6
millones de habitantes. Gestada desde la pobreza y para la pobreza, en mitad de
pantanos y manglares a un lado, la sabana, al otro. Entre hienas y rinocerontes
a un lado, hienas y jirafas, al otro.
*Para más información contactar con la asociación desde la
propia página web www.jvsi.org, o mediante email (info@jvsi.org /
jeunes.vsi@hotmail.fr / jvsitogo@hotmail.com, a la atención de Alexis Kombaté).